No todo lo habíamos visto Existe un dicho muy generalizado, que he suscrito en infinidad de ocasiones, según el cual nada es diferente en este pecador mundo. Si acaso, sí existe una nueva forma de mirar lo que otros antes han visto con otra mirada. Resumiendo: Nada queda por decir, todo ha sido contado. |
Monster, UN TEBEO RENOVADOR Hace un par de años
me he encontrado con un cómic, un tebeo, que me ha destrozado
este esquema. Su título no es otro que el de Monster,
del genial autor japonés Naoki Urasawa.Evidentemente
lo novedoso no está en lo que cuenta, una mezcla de géneros
magistralmente desarrollados y entremezclados, tampoco en como los cuentas
o como los aglutina. La novedad esta en el enorme atractivo que esta
serie acumula en cualquier parte de las historias que desarrolla, independientemente
del resto de la historia global. Siempre he sostenido la idea, de que,
se me hace sumamente difícil valorar una historia de cómics
por entregas. Necesito leer la historia completa una vez finalizada
y con bastante frecuencia esta lectura completa discrepa en su valoración
de cualquier otra que de ella haya podido hacer en forma fraccionada. SECUELAS CINEMATOGRáFICAS Cuando escribía este artículo me venía a la mente que algo parecido había visto recientemente en otro medio de expresión, hasta que recordé donde. Había sido en la primer entrega de la última película de Quentin Tarantino, Kill Bill 1.Esta joya de la estética moderna me impresiono por su ritmo, atrevimiento y composición de cada imagen, hasta tal punto, que en si misma es casi una Obra Maestra- lastima de la lucha final-. Esta película es tan buena que aunque no se vea la segunda parte no representa ningún inconveniente para poder valorarla y entenderla sin final. Es más, si se la junta con la Kill Bill 2 el conjunto baja bastantes enteros, dada la gran diferencia estética, de ritmo y composición existente entre ambas entregas. Tarantino no cabe duda que ha leído muchos tebeos como Monster e incluso la propia serie. FAUSTINO R. ARBESÚ |